FacebookTwitteremailPrint Ocurrió antes de ayer, en respuesta al amparo que presentaron ambientalistas entrerrianos en conjunto con el sindicato docente Agmer pidiendo la nulidad del decreto de Gustavo Bordet que redujo las distancias de fumigación con agroquímicos cerca de escuelas rurales que había fijado la Justicia y las fijó en 100 metros para las pulverizaciones terrestres y […]
Ocurrió antes de ayer, en respuesta al amparo que presentaron ambientalistas entrerrianos en conjunto con el sindicato docente Agmer pidiendo la nulidad del decreto de Gustavo Bordet que redujo las distancias de fumigación con agroquímicos cerca de escuelas rurales que había fijado la Justicia y las fijó en 100 metros para las pulverizaciones terrestres y 500 para las aéreas • “Siempre decimos lo mismo, son mucho más importantes las buenas prácticas que la distancia”, subrayó Daniel Kindebaluc de Fedeco
“Queremos que se mantenga vigente el decreto del gobernador”, afirmó Daniel Kindebaluc de Fedeco y señaló para que ese sector agropecuario es ése decreto, el Nº 4407 fechado el 14 de diciembre pasado, el que rige hoy para regular las pulverizaciones en cercanía de escuelas rurales en la provincia y no el último fallo del Juez Oscar Benedetto respecto al tema que había establecido tres mil metros para las aspersiones aéreas y mil metros para las terrestres, haciendo lugar a un amparo presentado el año pasado por Agmer y el Foro Ecologista en búsqueda de proteger la salud de alumnos y docentes de esos establecimientos del interior entrerriano.
El texto legal del Ejecutivo “no era todo lo que se pedía, pero zanjaba la dificultad o la complicación que habían causado los dos fallos judiciales anteriores”, reconoció el dirigente rural y afirmó respecto a la polémica sobre las distancias: “Siempre decimos lo mismo: son mucho más importantes las buenas prácticas que la distancia. Si se hace bien, se puede hacer a diez metros la fumigación y no habrá ningún problema; pero si se hace mal por más que pongamos mil metros de distancias, eso va a causar problemas. Entonces, no es una cuestión de distancias sino de hacer bien el trabajo, por eso decimos lo de las buenas prácticas”, se explayó Kindebaluc.
Por todo esto, el lunes pasado 18 de marzo las entidades que conforman la Mesa de Enlace junto a la Bolsa de Cereales y acopiadores fueron a los tribunales de Justicia para solicitar que se rechace el amparo que promovieron los ambientalistas contra el decreto Nº 4407.
“Se le reclama al poder político que haya controles para no perjudicar a nadie”, continuó el presidente de Fedeco y precisó que las comunidades de las escuelas rurales “están cuatro horas por días, cinco veces a la semana y nuestras familias viven todos los días acá, incluso los chicos que no van a la escuela y tienen menos de 5 años. Todos vivimos en este ambiente”, se defendió y por tanto consideró que las distancias que impuso la Justicia “no tienen lógica”.
“Uno reconoce todas las posturas y tratamos de defendernos de la mejor manera”, reafirmó luego y marcó tres puntos fundamentales para el sector respecto a las pulverizaciones: “La pulverizadora tiene que estar habilitada, el que la conduce tiene que tener la licencia correspondiente y debe haber una receta agronómica de un ingeniero donde se consideren las cuestiones ambientales”.
Dicho esto, Kindebaluc dejó claro que el sector “nunca va a defender a alguien que no cumpla con lo legal. Y cumpliendo esos tres requisitos, se baja al mínimo la posibilidad de que haya algún perjuicio así que si alguien después llega a cometer algún error, que se lo castigue en forma debida ; en eso somos conscientes de la importancia que tiene”, completó.