FacebookTwitteremailPrint Técnicos de la Comisión Administradora para el Fondo Especial de Salto Grande llegaron hasta Aldea Santa María, en el departamento Paraná, a fin de comenzar a trabajar en un proyecto que persigue la puesta en valor de una propiedad destinada a convertirse en Museo Religioso. La tarea surge a partir de un pedido […]
Técnicos de la Comisión Administradora para el Fondo Especial de Salto Grande llegaron hasta Aldea Santa María, en el departamento Paraná, a fin de comenzar a trabajar en un proyecto que persigue la puesta en valor de una propiedad destinada a convertirse en Museo Religioso.
La tarea surge a partir de un pedido que le hicieran los pobladores locales al ministro de Planeamiento de la provincia, Luis Benedetto, quien a su vez delegó en los técnicos de CAFESG hacer el primer abordaje al lugar a fin de evaluar la factibilidad de la idea y de ser así comenzar a trabajar en el proyecto en sí mismo.
Quien hizo las veces de nexo entre los lugareños de Aldea Santa María y los funcionarios provinciales, fue el reconocido periodista de Concordia, José Luis Sack, nacido en la aldea y cuyo bisabuelo fuera uno de los primeros inmigrantes provenientes de la región Rusa del río Volga adonde emigraran desde Alemania, por esto la colectividad es conocida como Alemanes del Volga.
Sack, luego de la jornada de trabajo junto a los profesionales de CAFESG y en nombre del resto de pobladores expresó: “nos sentimos muy satisfechos, felices y agradecidos por la presencia de los técnicos de CAFESG en nuestra comunidad, y agradecemos la respuesta dada a nuestra petición por parte del ministro Benedetto, es muy importante en los tiempos que corren sentirse acompañados y que alguien nos de una mano y nos asesore, esto es doblemente importante porque desde pequeñas comunidades como la nuestra no siempre es fácil tener contacto con funcionario u organismos que tomen decisiones, porque el arribo de técnicos para ver una casa que queremos convertir en Museo Religioso es muy significativo para nosotros especialmente”.
“Aldea Santa María es netamente católica practicante desde su misma fundación, ya que nuestros antepasados emigraron desde Rusia cuando los quisieron convertir a otra religión, y si tenemos en cuenta que nuestra población siempre ha sido de unos 200 habitantes promedio, le hemos dado a la Iglesia más de 60 religiosos entre sacerdotes, monjas, laicos consagrados y hasta un obispo; por esto la idea de hacer un Museo Religioso en una casa muy significativa para nosotros ya que allí vivió una señora que fue catequista de casi todos los que hoy somos adultos por estos pagos, es decir que la religión está muy arraigada en nuestra comunidad y colectividad desde hace siglos” relató Sack en relación al porqué un museo de estas características.
Por su parte, el coordinador general de CAFESG, Arq. Roberto Acuña, quien viajó a Aldea Santa María junto a otro profesional del organismo, señaló que “siempre estos desafíos son muy emocionantes para un arquitecto, ya que no solo se trata de un proyecto de obra, sino que además tiene todo un trasfondo histórico cultural para los destinatarios de la misma, así es que ya hicimos las medidas, fotografiamos todo, recogimos los testimonios de lo que quieren los lugareños y nos pondremos a trabajar en un proyecto que satisfaga los anhelos de quienes sueñan y gestionan esto”.
“Que CAFESG esté hoy acá, tan lejos de nuestro radio de acción histórico, es gracias al Convenio de Colaboración que hemos firmado con el Ministerio de Planeamiento de la Provincia, que conduce el ingeniero Luis Benedetto, y que surgiera como una iniciativa del gobernador Gustavo Bordet, el mismo nos permite acercar nuestros conocimientos y experiencia de más de veinte años realizando obras y proyectos a todo el territorio provincial, lo cual revaloriza la calidad de los recursos humanos de nuestro organismo” explicó Acuña.
Además del museo en sí mismo, los lugareños también plantearon la necesidad de dejar un espacio en el exterior para que allí también pueda funcionar una feria de artesanías locales.
Aldea Santa María es una localidad y centro rural del departamento Paraná. Se dispuso que se convierta en comuna de 1° categoría a partir del 11 de diciembre de 2019. Se encuentra sobre la margen derecha a 2 km de la Ruta Nacional 12, la cual la vincula al sudoeste con Cerrito y al nordeste con La Paz.
La población de la localidad, es decir sin considerar el área rural, era de 228 personas en 1991 y de 269 en 2001. La población de la jurisdicción de la junta de gobierno era de 658 habitantes en 2001.
El poblado surgió en 1887 cuando un grupo de alemanes del Volga recién llegados a la Argentina compraron al señor Enrique Woodrich una estancia de 3 mil hectáreas. La estancia no poseía fuentes de agua por lo que se presume que los inmigrantes pudieron haber sido engañados, considerando lo vital de esta circunstancia para el asentamiento de un nuevo poblado. Las tierras estaban cubiertas de montes de espinales, los cuales fueron paulatinamente reemplazados por cultivos agrícolas, favorecidos por la fertilidad de la tierra. Hoy, su mayor actividad está centrada en el tambo.