El Gobierno decidió que prorrogará el congelamiento de los alquileres, pero todavía no definió qué pasará con los préstamos para vivienda. La cuota de los préstamos para vivienda podría saltar hasta más de 30% si no hay definiciones.
El 30 de septiembre vencen los decretos con los que el Gobierno frenó las subas de los alquileres y la actualización de los créditos hipotecarios UVA, en marzo. A dos semanas de esa fecha clave, el Poder Ejecutivo decidió que prorrogará el congelamiento de los alquileres, pero todavía no definió qué pasará con los préstamos para vivienda, indicaron a TN fuentes oficiales.
El decreto 320, de marzo de este año, suspendió los desalojos y congeló los precios de los alquileres hasta fines de septiembre. También prorrogó los contratos que vencieran durante el periodo de Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO). Esa norma dispuso que las diferencias de precio que resultaran entre el congelamiento y la actualización del contrato se saldarían en entre tres y seis cuotas.
Sin desalojos
Fuentes oficiales
confirmaron que la prohibición de desalojos y el congelamiento de precios
continuarán, aunque no especificaron hasta cuándo. La Federación Nacional de
Inquilinos pidió que sea hasta fines de marzo y el oficialismo, a través de la
diputada Fernanda Vallejos, ingresó un proyecto de ley con esos términos.
Gervasio Muñoz, referente de Inquilinos Agrupados, sostuvo en
un comunicado: “Sabemos que el gobierno nacional está trabajando en la
extensión del decreto y en un plan de desendeudamiento, pero necesitamos que lo
comunique oficialmente para frenar la presión de las inmobiliarias y los
propietarios sobre los inquilinos. Los niveles de incertidumbre y angustia son
enormes. No pueden anunciar la extensión un día antes de que venza el decreto
actual, si esperan hasta ese momento, ya miles de familias habrán sido echadas
de forma violenta o económicamente de sus casas. Es más sencillo solucionar
esto ahora, y no cuando ya estén en la calle”.
Los hipotecarios esperan
Esa incertidumbre se multiplica en el caso de
los más de 100.000 titulares de créditos hipotecarios UVA, cuyas cuotas también
se congelaron en marzo y que
entrarían ahora en la fase de deshielo. Al respecto, la Jefatura de Gabinete y
el Ministerio de Hábitat trabajaban en alternativas, que no especificaron.
El decreto 319/2020 congeló todas las cuotas de los préstamos
UVA. En agosto, luego de las PASO, el expresidente Mauricio Macri había hecho un primer congelamiento, que
venció en enero y se prorrogó por otro mes, para las escrituras de
hasta 140.000 UVA.
Para salir de esa medida, el Gobierno dictó en febrero una
liberación gradual: descongeló las cuotas pero la diferencia entre el valor de
agosto y el de marzo podía saldarse en pagos mensuales durante un año, que se
sumaban al crédito. El congelamiento de marzo hizo que eso fuera inaplicable.
Incrementos
“Hay dos situaciones. Quien entró en los dos
congelamientos puede sufrir un salto de hasta 60% en la cuota si no se toman
medidas“, dijo Marcelo Mercere, integrante del colectivo de
Hipotecados UVA que mantuvo reuniones con el Gobierno hasta hace tres semanas.
“Una familia con hipoteca UVA que tiene una cuota de $23.800 saltaría a
$30.700 y podría sufrir hasta el 60% en el caso de que haya sido alcanzada por ambos
congelamientos; es decir el del anterior gobierno y el fijado por la actual
administración. En este último caso la cuota pasaría de $20.600 a $32.600″,
advirtió el colectivo de deudores en un comunicado.
Sin definiciones
Federico González Rouco, especialista en temas de vivienda, explicó a Tn que la brecha entre el valor de la UVA y la cuota actual llega hasta 33,8 por ciento. Esa es la diferencia entre la UVA “pura” y la cuota que comenzó a congelarse en agosto del año pasado. Desde el congelamiento de febrero a la actualidad, el salto es del 27 por ciento. Si no hay definiciones, la cuota dará ese salto desde octubre. A ese número hay que sumarle la deuda que se acumuló en los últimos meses.
Confusión
La confusión escaló este
sábado, cuando el Banco Nación envió un mail a los más de 50.000 titulares de créditos hipotecarios UVA
indicándoles que, a partir de octubre, debían pagar las diferencias acumuladas
en los últimos meses y podían hacerlo en tres o seis cuotas.
Al rato, una segunda comunicación pidió desechar ese correo
electrónico. “No estaba destinado a deudores de préstamos hipotecarios en UVA. Estamos
trabajando para dar una solución a esa temática”, agregó el Nación,
principal colocador de préstamos para la vivienda indexados del mercado. La banca pública colocó el 75%
de estos financiamientos.
A comienzos de mes, el presidente Alberto Fernández sostuvo
que el gobierno trabajaba en una medida que contemple el “esfuerzo
compartido” entre la banca, el Estado y el deudor. Dijo que el Estado puso $1500
millones para que las cuotas de los préstamos no se dispararan.