La decisión del gobierno nacional de habilitar el regreso de las clases para alumnos de los últimos ciclos de primaria y secundaria -que anunciará, hoy, el ministro de Educación, Nicolás Trotta- disparó dudas y cuestionamientos en los gremios, cuyos referentes consideran que no están dados los recursos ni las condiciones epidemiológicas por el coronavirus para que esto ocurra, en el corto plazo
Trotta aseguró, el domingo pasado, que “no hace falta la vacuna para volver a clases, pero tiene que haber datos objetivos que nos permitan dar pasos seguros”. Para Sonia Alesso -secretaria general de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera)-, esos datos hoy no existen.
“Hay presiones políticas para que abra todo, como si no pasara nada, y la verdad es que estamos en una situación epidemiológica muy grave, con ciudades y provincias en donde no hay camas”, sostuvo Alesso, en diálogo con LA NACION, y agregó: “Me parece absurdo que, cuando había bajos niveles de contagio, no se dictaban clases presenciales, y ahora, con altos niveles, se presione para que vuelvan”.
Según la referente de Ctera, el anuncio del ministro de Educación -de cual desconoce los detalles, porque “los sindicatos no fueron convocados”-, surge como respuesta a “presiones” políticas. “Creo que muchos dirigentes políticos no deben ni haber leído los protocolos que hicieron los especialistas, porque la vuelta a la presencialidad ya empezó, pero en lugares concretos, de baja circulación. Hoy no está pasando eso, es alarmante el crecimiento del virus”, remarcó Alesso.
En ese sentido, la santafesina -también secretaria de la Asociación de Magisterio de Santa Fe-, hizo hincapié en que “no se está tomando en cuenta la cifra de niños y jóvenes contagiados” ni la “cantidad impresionante de docentes contagiados y muertos” a nivel mundial. Poner a las personas en esta situación sin tener la certeza de que no haya contagios, es estar pensando en otra cosa, afirmó la referente sindical.
Si bien Alesso indicó que “todos queremos la vuelta de los chicos a la presencialidad”, también advirtió que no solo tienen que darse las condiciones epidemiológicas, sino también la “la cuestión estructural” y de infraestructura: “Incluso si llegasemos a un nivel bajo de contagio, van a hacer falta docentes auxiliares para acompañar la trayectoria de los alumnos que tuvieron dificultades para seguir las clases virtuales, así como personal de limpieza permanente”.
• Más inversión
El incremento de la inversión educativa es una cuestión que destacaron tanto Alesso como Sergio Romero, el secretario general de la Unión Docentes Argentinos (UDA). En diálogo con LA NACION, Romero indicó que la clave del regreso a clases presenciales radica en una mayor inversión, que en este momento “no hay índice” de que pueda hacerse.
“Todos queremos un sistema educativo funcionando, pero nos vamos a encontrar con muchas dificultades”, dijo Romero, quien advirtió que el Gobierno está “muy lejos de poder asegurar el mínimo que fija la ley para la inversión, que es un 6% del PBI”.
Según el secretario de UDA, el anuncio de Trotta no podría materializarse en la brevedad: “Una cosa es la voluntad política y las declaraciones, otra cosa es la realidad. No vemos, en lo inmediato, las chances de que se haga”. Sin embargo, el referente de los docentes argentinos destacó que algunas provincias ya han “dado señales de poder hacerlo”.
Sergio Romero, del gremio de UDA, reclamó más inversiónSergio Romero, del gremio de UDA, reclamó más inversión Fuente: Archivo
“Hay lugares con mucha decisión política y que han hecho las inversiones suficientes. San Luis está funcionando bien. La ciudad de Buenos Aires también se ha preparado para revincular a los 6500 alumnos -que no tuvieron conexión durante estos meses-, mismo Formosa”, sostuvo Romero, quien también enumeró algunas de las provincias en peor situación: “Las más complicadas serían Chaco, Misiones, las zonas periféricas de la provincia de Buenos Aires y algunas partes de Santa Fe”, publicó La Nación.
Por último, Romero advirtió que, aunque regrese la presencialidad, deberán afrontarse “muchas otras pandemias”, como son el ajuste de salarios y la falta de infraestructura escolar. “Los salarios estarán debajo de la línea de pobreza, y seguramente tengamos que negociar eso”, concluyó.
• “No hay condiciones”
Jorge Adaro, titular de la Asociación de Docentes de Enseñanza Media y Superior (Ademys), también se mostró crítico respecto de la decisión del gobierno nacional. En una entrevista en Todo Noticias, Adaro consideró que “no hay condiciones para el regreso a las aulas en el marco de la pandemia”, ni para la modalidad “masiva”, ni para la “focalizada”; en referencia a la voluntad del gobierno porteño de revincular a 6500 alumnos que perdieron contacto con la escolaridad durante la pandemia.
El referente de Ademys, además, indicó que los gobiernos “no han garantizado la continuidad del proceso educativo” y que “llevar a los chicos dos horas semanales al colegio, no revierte lo que se perdió”.