Un profundo malestar y una imperiosa necesidad de respuesta es lo que evidencia el comunicado emitido este miércoles por la Cámara Entrerriana del Turismo al que titularon “No hay más tiempo para discursos”, a casi 8 meses de iniciado el aislamiento obligatorio en el que el rubro siente haberse perpetuado.
Apelando por momentos al sarcasmo, el escrito no ahorra críticas para el ministro Juan José Bahillo. Tampoco faltó el recuerdo de su antecesora, Carolina Gaillard.
“230 días, desde el inicio de esta hartante cuarentena, medida resistida hasta el cansancio por miles de empresarios, emprendedores, comerciantes, prestadores de servicios. Medida que ha llevado a la quiebra a más del 40% de todos los prestadores de servicio turístico de la provincia, con la consecuente pérdida del trabajo de miles de personas, que en forma directa o indirecta desarrollaban su actividad comercial en nexo con aquel que ya no volverá a abrir sus puertas al servicio de la llegada de los turistas la próxima temporada”.
Cansados de la espera, señalan: “230 días, y el ministro solicita una semana más para definir si el 01 de diciembre, la provincia de Entre Ríos estará en condiciones de abrir la temporada de verano”.
“230 días, y aún estamos esperando que nos pongan sobre la mesa, los protocolos definitivos de cada una de las actividades que estarán habilitadas para poder ofrecerlas al turista que llegue a nuestras tierras. Ahora entramos en la dulce espera, aguardando que desde el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación den a luz los protocolos que faltan, mientras tanto los prestadores debemos prepararnos y no podemos hacerlo, por la inacción de la Sectur”.
“230 días, y aún se están por reunir con los intendentes de las localidades turísticas, con el fin de aunar criterios de acceso a cada una de las ciudades, para evitarle al visitante, que rebote de frontera interior a frontera interior, acorde al capricho particular de cada Coes local”, sentencian.