Por primera vez en 2020 superó el 3% mensual: fue de 3,4, con lo que acumula 26,5 % en el año y 37% en los últimos 12 meses.
Según surge del informe de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET), la inflación de los trabajadores superó el 3% mensual y se ubicó en 3,4%. Se trata del mayor registro de 2020 y es la primera vez que supera el 3% mensual desde el inicio del aislamiento social preventivo y obligatorio.
Este porcentaje muestra una significativa aceleración respecto al 2,8% registrado en septiembre y es el mayor de 2020. De este modo, la inflación acumuló un 26,5% en los primeros diez meses del año, y un 37,0% en los últimos doce meses.
Si en noviembre y diciembre la inflación fuera del 3%, 2020 habrá finalizado con una suba de precios del 34,2%. Si bien esto representa un valor por encima del que figura en el Presupuesto (32%), implica una importante desaceleración respecto al 52% registrado en 2019.
Factores detrás de la aceleración
En primer lugar, fue un mes caracterizado por un significativo incremento en la brecha cambiaria, que llegó a superar el 100%. Esto generó faltantes de insumos en diversas cadenas industriales y, a su vez, introdujo presión en ciertos precios fuertemente atados al valor del dólar.
En efecto, muchos comercios, ante el temor de una devaluación que encareciera el costo de reposición, optaron por no vender o por hacerlo con importantes aumentos. A modo de ejemplo, los materiales de construcción subieron un 4,5%, los autos cero kilómetro un 6,6%, los muebles un 7%, las motos un 15,7% y las bicicletas un 20,6%.
En segundo lugar, se destaca el aumento de precios de los alimentos durante el mes (4,3%). Aquí es posible distinguir dos fenómenos diferentes. Este se explica porque, por un lado, los productos estacionales continúan teniendo subas de precios intensas (las verduras se encarecieron 11,1% y las frutas un 12,5%).
Por otro lado, porque los alimentos que forman parte del programa de Precios Máximos (lácteos, harinas, pastas, bebidas, aceites, etc.) tuvieron incrementos permitidos de entre el 3% y el 5%, en promedio. En este último caso, las subas se dan tras una significativa desaceleración de precios en el período abril-octubre.
En contraste, las frutas y las verduras vienen siendo los rubros de la canasta con mayor incremento de precios (subas interanuales por encima del 70%, esto es, alrededor del doble que la inflación promedio).
En tercer lugar, se destaca el hecho de que las nuevas reaperturas de actividades y la creciente reactivación de muchas de ellas fueron de la mano de incrementos en precios que habían estado casi congelados durante meses. A modo de ejemplo, los gimnasios relevados subieron 21% promedio y las peluquerías lo hicieron en 4,7%.
Finalmente, también incide el hecho de que indumentaria y calzado continuaron con subas intensas (4,9% promedio). Aquí se observó un claro incremento de precios en la víspera del Día de la Madre y una importante retracción de precios tras esa fecha.