Desde el Colectivo Nacional de Hipotecados con créditos UVA Autoconvocados manifestaron a APFDigital su insatisfacción con los anuncios oficiales respecto de los créditos • Niegan que se pueda hablar de un “subsidio” y aseguraran: “Volvieron a ganar los bancos”
El Gobierno nacional, a través del Ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi, anunció que a partir del mes próximo las cuotas de los créditos hipotecarios otorgados en UVA y que ajustan por inflación, no podrán superar el 35 % de los ingresos del tomador del crédito. Asimismo, adelantó que el Banco de la Nación Argentina y el Banco de la Provincia de Buenos Aires subsidiarán el monto que supere dicho porcentaje y que sólo los créditos otorgados por el Banco Hipotecario Nacional dentro del programa Procrear UVA pasarán a actualizarse también a partir de junio por la Fórmula Hogar.
“Las medidas anunciadas no atacan el problema de fondo, que es el sobreendeudamiento debido a la indexación del capital por inflación que padecemos los tomadores de créditos hipotecarios en UVA”, afirmaron.
“El límite del 35 % de afectación del ingreso ya estaba incluido en el DNU 767/2020 art.4, que finalizará en junio de 2022. El Ministro no aportó precisiones sobre si lo que se modifica es que el tope se mantendrá durante toda la vigencia del crédito, ni qué sucederá con aquellos que tomaron sus créditos en entidades privadas. ¿Deberán negociar directamente con los bancos? De ser así, es un verdadero dislate”, consideraron.
“Al hablar de subsidio, el ministro alude a que el hipotecado se vería beneficiado ya que no pagaría las sumas que superen el 35 % de sus ingresos. Eso es capcioso. No se puede hablar de subsidio en el marco de un crédito que ajusta por inflación más una tasa de interés que va desde el 3,5% hasta el 10 o 12 %. En la práctica, ello implica que todo el riesgo inflacionario es absorbido por el deudor y el banco a su vez se cubre del impuesto inflacionario con una tasa de interés que a todas luces resulta exorbitante”, criticaron.
“En todo caso el subsidio será para el sistema financiero que se asegura que el Estado no corrija una política pública de vivienda que nació durante la administración Macri, y no para el tomador final del crédito. Los bancos se aseguran cobrar sus créditos indexados sin asumir ningún riesgo”, advirtieron.
“En última instancia el deudor hipotecario seguirá viendo cómo su capital se indexa mes a mes por efecto de la inflación, lo que provoca que al finalizar el crédito haya pagado sumas que resultan imposible de mensurar. En ese marco no se puede hablar de subsidio”, sostuvieron luego.
“Es necesario aclarar que, al calificar al tomador del crédito para otorgarle o no el préstamo, los bancos establecían que la relación cuota ingreso no podía superar el 25 %. Ese umbral era el límite que fijaba el sistema financiero para obtener un crédito. Ahora el gobierno -a través del BCRA-, dispuso incrementarlo en 10 puntos porcentuales. Es indudable que no se tomó en cuenta la realidad acuciante de los hipotecados y que en cambio se priorizó el interés del sistema financiero. De otra manera no se entiende cómo se puede anunciar una medida de este tipo y presentarla como algo beneficioso para el deudor”.
“Hace más de tres años que venimos denunciando desde este Colectivo que los créditos hipotecarios en UVA son inviables en un país como la Argentina que padece una inflación crónica desde hace décadas y que este año se encamina a superar cómodamente el 45 % anual. Con salarios e ingresos que continúan ajustando a la baja desde hace 5 años, la pérdida constante de poder adquisitivo se traduce en un marcado deterioro de la calidad de vida de las familias hipotecadas”, expresaron.
“Existe además un agravante y es que la cuota de estos créditos -a raíz del esquema de convergencia dispuesto en el DNU 767/2020-, se vienen incrementando en promedio un 8 % mensual. Un ritmo insostenible para cualquier familia hipotecada que batalla a diario con la permanente suba de los alimentos y de todos los servicios que conforman la canasta básica.
Ese 8 % mensual al cual hacemos referencia, implicará que durante este año las cuotas que permanecieron congeladas hasta el mes de Enero de 2020, se vean incrementadas al finalizar el año en un rango que oscila entre el 80 y el 100 %. No existe ingreso, ni salario que soporte semejante ajuste”.
“Este es el sexto anuncio a través del cual se pretende instalar en el seno de la sociedad que se ha brindado una solución definitiva a la problemática UVA. Ninguna de las medidas encaradas hasta el momento ha atacado el problema de fondo y por lo tanto no han sido más que auxilios transitorios que han debido ser enmendados a los pocos meses”, enfatizaron.
“Las promesas de campaña del presidente Alberto Fernández siempre aludieron a la salida instrumentada en el 2003 durante la presidencia de Néstor Kirchner. Esas medidas instrumentadas por DNU y leyes sancionadas por el Congreso evitaron la ejecución de miles de viviendas”, recordaron.
“El sistema financiero se opuso a esa salida. No obstante, el gobierno de entonces avanzó con decisión y firmeza. Esa batería de medidas alcanzó a todos los hipotecados y sirvió para brindar una solución definitiva. Se requiere de coraje y voluntad política para avanzar con medidas radicales que transformen estos créditos. Ese coraje y esa voluntad política se aplicaron en los comienzos de este siglo cuando hubo que paliar los efectos de la explosión de la salida de la convertibilidad”, dijeron.
“A un año y medio del inicio de la actual gestión, el gobierno nacional sigue explorando excusas que no conducen a una solución de fondo. Mientras la búsqueda de una “solución” sea desde la mirada financiera del BCRA, no será social. No habrá justicia social con las familias con créditos UVA. Volvieron a ganar los bancos. Y pierde la gente. Antes y ahora también”, finaliza el comunicado enviado a esta Agencia por el Colectivo Nacional Hipotecados UVA Autoconvocados.