El Xeneize se metió en la definición del campeonato tras derrotar a la Academia por 6 a 5 desde los doce pasos. En los 90 minutos, el trámite había sido muy favorable para Racing, pero Boca resistió, fue 0 a 0 y en los penales se clasificó.
Boca se clasificó hoy a la final de la Copa de la Liga Profesional, tras vencer en los penales a Racing por 6 a 5, luego de igualar sin goles en el tiempo reglamentario del partido semifinal disputado en el estadio de Lanús.
El conjunto boquense convirtió a través de Marcos Rojo, Carlos Izquierdoz, Guillermo “Pol” Fernández, Darío Benedetto, Sebastián Villa y Alan Varela, mientras que Agustín Rossi le atajó el remate a Enzo Copetti, mientras que el disparo de Eduardo Salvio lo contuvo Gastón “Chila” Gómez.
Racing lo tenía para ganar, más allá de los remates convertidos por Gonzalo Piovi, Edwin Cardona, Tomás Chancalay, Carlos Alcaraz y Javier Correa, pero Emiliano Insúa desvió su disparo, y Varela definió la serie.
Ahora Boca definirá el título con el ganador del partido que disputarán en el estadio de Huracán, Argentinos Juniors y Tigre, para llegar al cotejo decisivo el domingo 22.
Racing, por su parte, se quedó sin chances de lograr un nuevo título y tuvo un rendimiento impresionante en todo el torneo, en el que no perdió ningún partido en el tiempo reglamentario.
En el inicio Racing logró hacerse del control del balón, característico en el equipo de Fernando Gago, con Miranda y Moreno dominando la mitad de la cancha, mientras que Boca ofreció la dupla entre “Pol” Fernández y Varela.
Un cabezazo de Rojas y un remate de Chancalay, ambos desviado por la izquierda de Rossi, fueron las más claras de la “Academia” que fue veloz para la recuperación del balón, frente a un Boca que pasó varios minutos de desconcierto.
La zurda de Rojas y el duelo entre Rojo y Copetti fueron los condimentos más salientes de un partido en el que Boca nunca pudo encontrar su mejor ritmo y las llegadas al área de “Chila” Gómez brillaron por su ausencia.
Es que el circuito de juego de Boca tuvo muchos cortocircuitos y Benedetto debió bajar mucho a buscar el balón, y por eso el ataque boquense fue casi nulo.
Racing perdió a Rojas, uno de sus mejores hombres, y en su lugar ingresó Correa, que en su primera intervención cabeceó cerca de un palo ante una mala salida de Rossi.
Para la segunda parte las cosas estuvieron algo más parejas en los primeros minutos, pero luego Racing volvió a ser dueño del balón, con una buena distribución y siempre buscando abrir por los laterales.
Demasiado comprimido todo, con excesivas imprecisiones sin que ninguno de los dos pudiera tener chances claras, el partido fue transitando por lugares muy aburridos y hasta inciertos.
Boca nunca tuvo ningún problema en revolear el balón lejos de su arco, mientras que Racing buscó con pelotazos a las espaldas de los mediocampistas y casi lo tuvo Alcaraz de cabeza.
El partido entró en una zona en donde el que erraba algún detalle podía pagarlo caro y por eso las imperfecciones y los errores de los protagonistas hicieron que el juego fuera flojo y previsible, además de mal disputado
Luego todo se definió en los remates desde el punto del penal en los cuales Boca tuvo a Rossi y a la fortuna de su lado, mientras que Racing perdió por detalles que le costaron caro