A través de un índice de medición, la Organización Mundial del Turismo propone tener “datos más creíbles y comparables para las personas, el planeta y la prosperidad”. Cuáles son los indicadores que se tendrán en cuenta
Los viajes sustentables tienen que ver, esencialmente, con recorrer destinos rodeados de naturaleza promoviendo el cuidado y la preservación del medioambiente. Afortunadamente, cada vez más países buscan atraer a las personas hacia esta clase de itinerarios. Por caso, recientemente, la Organización Mundial del Turismo (OMT) presentó junto a más de 100 expertos la nueva norma de la Medición de la Sostenibilidad del Turismo (MST).
¿De qué se trata? “De producir datos más creíbles y comparables sobre el papel del turismo para las personas, el planeta y la prosperidad. Este marco de datos empoderará a los responsables públicos y al sector privado para formular políticas innovadoras y transformar los modelos de negocio”, señalaron desde el organismo en un comunicado.
Así las cosas, en 2023, la OMT pondrá en marcha esta medida entre sus países miembro, para tener disponibilidad de “informes ambientales, sociales y de gobernanza para las empresas turísticas”. Esta iniciativa se concretó con la colaboración de investigadores de la Universidad de Oxford, en el Reino Unido, quienes acercaron información sobre los destinos que mejor promueven estas políticas; de la Organización Internacional del Trabajo; y de la División de Estadística de las Naciones Unidas.
Cabe señalar que el turismo se menciona explícitamente en tres de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): crecimiento y trabajo decente; consumo y producción; y océanos sostenibles. “La OMT cree firmemente que el turismo puede desempeñar un papel en el logro de los ODS. El turismo es un fenómeno social, cultural y económico. Depende y tiene un impacto en la economía, el entorno natural y construido, la población local de los lugares visitados y en los propios visitantes. Debido a esta gama de impactos y al amplio espectro de partes interesadas involucradas, existe la necesidad de un enfoque holístico para la medición”, precisaron desde la entidad.
El organismo destacó “el excelente trabajo realizado por países y destinos subnacionales, que puede servir de inspiración para alentar a otras naciones y destinos a unirse al esfuerzo internacional”. Los aspectos evaluados en estos casos son los que servirán para medir la sustentabilidad a futuro. De este modo, los siguientes puntos del planeta aparecieron como los más destacados en la búsqueda de este turismo.
-Costa Rica, por la estimación de la contribución económica del turismo basado en la naturaleza.
-Indonesia, por estudiar los impactos ambientales del turismo en áreas marinas.
-Nueva Zelanda, por la medición de la contribución del turismo a las emisiones de gases de efecto invernadero.
-Sudáfrica, por un método experimental para valorar el turismo basado en la naturaleza.
–España e Islas Canarias, por establecer el enfoque en los “microdestinos, ya que la mayoría de los problemas de sostenibilidad relacionados con el desarrollo turístico se ubican en ciertas áreas pequeñas de un país”, dijeron desde la OMT.
-Uganda, por la integración de las temáticas de biodiversidad y turismo.
-Países árabes, ya que de acuerdo a la OMT tienen “notables perspectivas de mayor crecimiento en el mercado internacional de mercados turísticos, y están interesados en sus singulares características naturales, atractivos culturales y patrimonio”.
Otras inquietudes que buscará resolver la OMT en sus mediciones serán “cómo generar riqueza a través del turismo sin deteriorar la condición del ecosistema; cómo desarrollar una adecuada gestión de áreas silvestres protegidas en función de la economía y las visitas; qué oportunidades se le presentan al turismo como sector para mantener un equilibrio entre el crecimiento económico y ecosistemas saludables”, entre otras.
“Los actores del turismo están cada vez más preocupados por la sostenibilidad del sector, especialmente ante desafíos que incluyen la recuperación de la pandemia, la emergencia climática y el conflicto geopolítico. En el turismo y más allá, las personas también son más conscientes de la capacidad del turismo para avanzar, o incluso revertir, el progreso hacia la agenda de desarrollo sostenible de las Naciones Unidas”, añadieron desde la OMT.
Y cerraron: “Los gobiernos, las empresas y los consumidores necesitan métricas transparentes y fiables, que deben producirse de manera armonizada con el fin de que haya referencias en cuanto a rendimiento. Esto representa la respuesta del turismo a la voluntad de ir más allá del PBI”.
Cabe repasar que el turismo sostenible es un llamado a la acción que apunta también a los viajantes. ¿Por qué? Porque deben adaptar sus actividades y sus decisiones al cuidado de la naturaleza. Lo ideal, entonces, es que las personas, durante sus vacaciones, participen de estas prácticas y luego las repliquen en sus hogares. Así, por ejemplo, los turistas deben consumir productos locales de cada destino; elegir travesías cerca de la zona; minimizar la cantidad de residuos que producen; hidratarse con una termo propio; movilizarse en bicicletas; y respetar la fauna y la flora, entre otros puntos.