Firmes declaraciones del candidato a gobernador Pedro Galimberti. En un hilo en la redes sociales preciso “los entrerrianos no tenemos jefe, para que nos digan a quien votar. Somos un pueblo libre, soberano, de profunda raíz federal y defensores de la libertad”.
El candidato a gobernador por “Entre Ríos Cambia” le recordó al presidente del partido a nivel nacional Gerardo Morales que “borró con el codo lo que escribió con la mano. No lo juzgo, sólo le pido coherencia y honrar el valor de la palabra, que es lo que le está faltando a la dirigencia política”.
Gerardo Morales Presidente de la UCR, en visita proselitista a la provincia no hace más de 5 meses, a todas voces en Paraná y Concordia señalaba que Entre Ríos debía tener un candidato del partido en las elecciones a gobernador.
Hoy acompaña a Larreta como vicepresidente, y por descuento, también responsable de no permitir, como ocurriera en todas las oportunidades anteriores, el pegado con candidatos nacionales a hombres de su propio partido como Galimberti.
La situación torno en la presentación de listas y se extiende en estos días. Son actitudes de tono bastante reñida con la democracia, uno de los pilares que siempre ha defendido el partido que el mismo representa.
En un contexto nacional de endeblez económica, donde las familias no pueden llegar a fin de mes, la dirigencia política se devalúa cada vez más por la falta de compromiso y doble discurso.
Respetando la posición adoptada por el dirigente nacional, cabe recordar que no fueron los comunicadores sociales, sino el propio Morales el que enarbolaba un discurso que hoy borra con el codo. Si a pocos meses de afirmar y pedir con énfasis una conducta, el mismo en tribunas públicas sostiene y dice otra cosa, es natural que el ciudadano común descrea cada vez más de la conducción política.
Nadie puede dudar, también, que existe posiciones encontradas en el radicalismo entrerriano; en un partido, que ha quedado demostrado en las últimas internas partidarias hubo un empate técnico al definir su conducción.