Doce personas denunciaron en la Justicia que fueron estafadas por sumas millonarias con artículos importados. Hay cuatro personas identificadas.
La justicia de Chajarí investiga una serie de denuncias de vecinos que dicen haber sido estafados por cifras millonarias por personas que les ofrecieron productos y artículos importados. De momento hay doce denunciantes y cuatro personas señaladas como parte del entramado delictivo.
Entre este viernes y el sábado por la noche, se realizaron diversos allanamientos solicitados por el fiscal Bruno Monzón y autorizados por el juez de Garantías Guillermo Mautone. Los procedimientos se concentraron en calle Moreno, Repetto, Hernandarias y Autovía 14.
Según informó la Jefatura Departamental de Federación, el despliegue tuvo resultados positivos: secuestraron celulares, CPU, tablets, sellos y documentación de Aduana Argentina. En una vivienda también encontraron cuadernos, chips de celulares, pendrives, notebooks y una importante suma de dinero.
Asimismo, se detalló que fueron secuestrados tres vehículos: una camioneta Volkswagen modelo Amarok; un auto Volkswagen, modelo Gol Trend; y una motocicleta marca Kawasaki, modelo Z-400.
Además, se indicó que la Delegación de Toxicología intervino en uno de los domicilios allanados ante la presencia de cocaína.
Finalmente, se precisó que en los procedimientos fueron identificadas cuatro personas, quienes en los próximos días deberán dar explicaciones sobre los artículos y su procedencia. Como así también sobre los documentos con el sello de Aduana Argentina, los cuales llamó la atención a los investigadores, quienes sospechan sobre su veracidad.
En la mira
En las presentaciones, algunos denunciantes contaron que entregaron sumas importantes de dinero por artículos que nunca llegaron a sus manos.
Por caso, se supo que una mujer entregó unos 500 dólares por un celular de última generación; y que un hombre entregó 20 mil dólares por una camioneta importada, que tampoco le fue entregada. Otros daminificados también refirieron haber hecho entregas de dinero por otros artículos tecnológicos, pero de los cuales nunca tuvieron noticia.
En el expediente aparece un caso particular: una mujer dijo haber sido estafada, pero horas después fue señalada por otros denunciantes como la supuesta ‘coordinadora’ de recaudar el dinero.