Por Rubén Dal Molin (*)
La abstinencia del poder que debe estar atravesando el diputado Bahillo, después de 20 años de desmanejos en el Estado que nos llevaron a la crisis que estamos viviendo como provincia y como Nación, seguramente distorsiona su mirada.
Pero se debe enterar el diputado que los entrerrianos decidieron dejar de financiar con sus impuestos y con su esfuerzo los privilegios de los políticos, como pasó durante estos 20 años en los que se destinaban millones de pesos para gastos reservados, autos oficiales para uso personal de los funcionarios, festival de adscripciones que perjudicaba la educación y en contratos en el Estado que no se sabía a dónde iban.
Lo que para el diputado es desconocimiento para cualquiera que tenga sentido común es ponerle límites al uso desmedido del Estado. Y nosotros estamos decididos a devolverle el sentido común a la política.
Entre otras cosas, podrá ir enterándose el diputado Bahillo que tener conocimiento de la administración es, por ejemplo, luchar contra los nichos de corrupción enquistados durante tanto tiempo en el Estado y hacer las denuncias correspondientes. O empezar a cumplir con el crédito en dólares que tomó y usó su gobierno, y que ahora nos toca pagar a nosotros.
También es conocer la administración, y los vicios que arrastra la administración por el mal manejo de la política estos 20 años, implementar el presupuesto base cero que viene a rediscutir cada gasto del Estado para que cada peso de los entrerrianos vaya en beneficio de los entrerrianos.
Resolver el nudo de la obra pública, y con un sentido estratégico reordenar sus pagos sin sobresaltos, es tener conocimiento de administración.
Vaya si no es tener conocimiento de la administración sostener los servicios básicos del estado recibiendo un tercio menos de recursos en términos reales, después de la crisis en la que nos dejó el plan platita del gobierno de Bahillo.
Reducir el gasto improductivo, es tener conocimiento de administración, tanto como, reconstruir vialidad provincial para que, de una vez por todas, sea un organismo al servicio de los entrerrianos que todos los días necesitan transitar por las rutas sin poner su vida en riesgo.
Tomar la decisión de congelar la planta de personal y gastos de funcionamiento y disponer que nunca más en el estado se ingresará sin concurso de antecedentes, es tener conocimiento de administración.
Plantear una metodología que asegure una transferencia limpia a un nuevo gobierno, es tener conocimiento de administración.
Proponer un plan estratégico de obra pública aprobado por la legislatura, es tener conocimiento de administración.
Como verá el diputado Bahillo, el arte de conocer no admite una mirada única. Y más si, en el fondo, ese conocimiento que reclama Bahillo esconde la reiteración de las prácticas que condujeron a la provincia y a la Nación a esta crisis y a la desilusión. Por eso los entrerrianos, y los argentinos, han dejado de conocerlos a ellos. Ese es el cambio de fondo, conózcalo diputado.
(*) Senador provincial Juntos por Entre Ríos