FacebookTwitteremailPrint Este domingo los dirigentes volvieron a suspender la fecha de primera división “esta vez mirando las páginas digitales de los pronósticos climáticos”. O tal vez “desde la parrilla de sus casas” aquellas que pueden disfrutar de los asados de domingo. Una falta de respeto total para aquellos que a diario se preparan para ofrecer […]
Este domingo los dirigentes volvieron a suspender la fecha de primera división “esta vez mirando las páginas digitales de los pronósticos climáticos”. O tal vez “desde la parrilla de sus casas” aquellas que pueden disfrutar de los asados de domingo. Una falta de respeto total para aquellos que a diario se preparan para ofrecer lo mejor cada domingo dentro de un campo de juego.
La Liga Federaense de Fútbol, en divisiones inferiores o primera, ha sufrido reiteradas suspensiones, un campeonato programado para cuatro meses sobre doce del año es muy poco serio, hasta se podría decir que fue diagramado por compromiso, muy lejos de lo que se aspira para el crecimiento del fútbol local y se afiance para estar a la altura de otros equipos y participar de manera digna en competencias organizadas por el Consejo Federal.
Los que entrenan en noches de intenso frio, los que terminan sus prácticas a las 22:00 horas o más algunos, los que regresan a sus hogares luego de largas jornadas de trabajo y después tienen que ir a entrenar poco son tenidos en cuenta. La condición física de los jugadores, la mejora de la técnica y la táctica ya no es un tema cotidiano en los jugadores al no contar con el respaldo de los dirigentes encargados de garantizar la continuidad de los campeonatos.
El nivel de nuestro fútbol ira decreciendo, y no será por la calidad técnica que pueda mostrar cada jugador, que los hay muy buenos; sino por el inexistente proyecto de fútbol que se baja desde la dirigencia y la escases de continuidad de partidos que brinde un ritmo de competencia que se consigue semana a semana.
La gente se está alejando de la cancha, los jugadores están perdiendo el entusiasmo por cumplir con cada práctica en sus instituciones, es entendible al no tener en claro que es lo que sucederá con un torneo en el que se prioriza lo económico antes de cumplir con el desarrollo del campeonato. Esperemos que se recapacite y cada uno desde su función este a la altura de los compromisos que asume.
No respetar el trabajo, el tiempo, el esfuerzo que realizan los jugadores y entrenadores a diario, genera malestar y también violencia (psicológica – emocional). Es momento de ser serios y valorar a quienes se esfuerzan para mantener vivo el fútbol de la Liga Federaense de Fútbol.